lunes, marzo 05, 2007

Info, imagenes y corto de "El Silencio"


Cuando llego el momento no lo recuerdo muy bien, solo puedo decir que había decidido hacer algo importante, algo en lo que embarcarnos no podía suponer un encuentro para gravar, sino que debíamos buscar toda la ayuda posible, entre técnicos y actores, personas que tuvieran algún tipo de experiencia, sin embargo, a decir verdad, no empece buscando a la gente así, primero necesitaba al protagonista, y sin él no tenía intención siquiera de empezar este cortometraje, que iba a contar con otros dos para terminar de contar la historia. Pero no sabía por donde comenzar, conocía actores en varios grupos de teatro pero no conocía ningún niño que quisiera actuar y que tuviera dotes interpretativas, la verdad, me relajé mucho en este tema, tanto que antes de llegar a hacer este cortometraje hice uno antes "El Reflejo" pero en el camino del anterior una luz me indicó el lugar. Yo estaba trabajando en una tienda en aquel entonces y uno de los representantes que allí venían me hablo de su nieto, la verdad en un principio no le preste demasiada atención, había mucha gente que hablaba por hablar y que a la hora de la verdad nada, pero me comento que el pequeño iba a estar una noche, con su padre (que es cantautor) haciendo una mezcla musico/ teatral y me dije a mi mismo, porque no, no tengo porque decir siquiera que estuve allí, no seria la primera vez, fui, observe y me sorprendí. En aquel niño había algo especial, no era la actuación en si, má bien era sus sentimientos, podías ver en su mirada aquello que sentía su personaje y nadie podría asegurar que estaba actuando, tenía una mirada intensa que transmitia con fuerza sus emociones, algo que él controlaba al actuar, y eso me sorprendió, no en la actuación en si, sino posteriormente, cuando hablé con él y le propuse hacer un cortometraje de suspense, en ese momento podía ver como se iluminaba su mirada, como olvidaba al actor que había visto un momento antes y me enseñaba al joven, alegre e infantil, que tenía delante. Era capaz de actuar con apenas diez años. Había encontrado a mi protagonista, Juan Ángel Garzón. Lo siguiente que necesitaba era el protagonista adulto, pero ya le tenía echado el ojo, un actor de teatro al que había conocido hacía poco tiempo y me había impresionado por su fuerza y versatilidad, Ángel Cuevas. Secundando a los protagonistas volvía a contar con Antonio Valverde, un actor que se redescubría en cada uno de los cortos en los que iba trabajando y que yo quería no perder. Así con unos actores con un buen nivel de actuación, y unos cuantos amigos, tenía ya el reparto artístico. Entre el reparto técnico tenía a Miguel A. S. Cogolludo, que trabajaría en el rodaje como cámara y en post-producción con los efectos especiales necesarios. Pero alguién que había conocido en mi anterior cortometraje, Miguel Mesas, se convertía en uno de los técnicos más importantes que tenía y que había conocido, ayudándome en todo el rodaje y la posterior post-producción, tanto en algunas pinturas mate como en el etalonaje del corto. Un nuevo miembro en este proyecto fue la maquilladora Cristina Ruiz, que hizo una gran labor con los actores y aguanto las lentas horas de trabajo. Así pues, tras varios meses de pre-producción, y unos problemillas con las localizaciones, que tuvimos que cambiar semanas antes del rodaje, provocando unos nuevos contratiempos. Sin embargo, no voy a dilatar más este comentario, tuvimos un trabajo muy lento, recolocando esquinas y casas donde no estaban, personas donde jamás estuvieron y el resultado final fue un cortometraje del cual estoy muy contento.